El Inter Miami continúa con su puesta a punto de cara a la nueva temporada. Es por ello que con Lionel Messi y sus ex compañeros del Barcelona a la cabeza, volaron directo hacia Arabia Saudita para dar inicio a un extenso itinerario y disputar una serie de partidos amistosos contra equipos asiáticos, entre los que se destaca un «The Last Dance» entre Leo y Cristiano Ronaldo, figura del Al Nassr.
Luego de enfrentarse a la Selección de El Salvador (0-0) y caer frente a Dallas (0-1), los dirigidos por Gerardo Tata Martino buscarán conseguir su primera victoria del año. Para ello, este jueves volaron 12 mil kilómetros desde Florida hacia Riyadh, capital saudí, sitio al que llegaron cerca de la medianoche.
Como curiosidad, y para dimensionar la longitud del vuelo, los jugadores debieron celebrar un cumpleaños en el aire, nada menos que el de Luis Suárez. El Pistolero celebró sus 37 años en el avión cuando sus compañeros le acercaron una torta de forma inesperada para que sople las velitas.
Bienvenido Leo: la llegada del Inter Miami a Arabia Saudita.Una vez que aterrizaron en Arabia, el plantel fue recibido de una forma curiosa, pero acorde a las tradiciones que se respetan en Medio Oriente: varios fueron los anfitriones que se acercaron hasta el aeropuerto para guiar a la delegación de Miami rumbo al hotel. Sin embargo, primero les entregaron a cada miembro del equipo un ramo de flores rosas y blancas, a tono con los colores que luce el escudo del club.
Según enseñan los videos, el cansancio era lo que primaba en cada uno de los jugadores. No obstante, los anfitriones continuaron con sus regalos: les otorgaron bocadillos y bebidas calientes, a pesar de que ninguno de los jugadores decidió probarlas. Y por si algo faltara, también se apreció la presencia de un saxofonista que sonaba su música mientras el equipo abandonaba el aeropuerto.
De esa curiosa manera fue como inició la gira asiática del Inter Miami. En lo que respecta a lo futbolístico, la primera parada será el Al-Hilal, el equipo de Neymar y que marcha primero en la liga árabe, al que se enfrentarán el lunes 29. Igualmente, el crack brasileño deberá ver el partido desde las gradas y no podrá compartir cancha junto a Leo, Suárez, Sergio Busquets y Jordi Alba debido a que todavía se encuentra recuperándose de la lesión en una de sus rodillas.
Tras esa cita, será el turno de una nueva edición, y quizá la última, del duelo que marcó una época: Messi contra CR7. El jueves 1 de febrero, los de Miami chocarán contra el Al-Nassr del astro portugués, en lo que será el último partido del conjunto estadounidense por Arabia Saudita. Aunque los viajes por Asia continuarán: las Garzas acordaron disputar otros dos encuentros de ese lado del globo.
El primero de ellos será en Hong Kong, el 4 de febrero, motivo por el cual los dirigidos por Martino deberán volar otros 6.000 kilómetros para enfrentarse a un combinado de estrellas locales.
Messi encabezando la llegada del Inter Miami a Arabia Saudita. Foto: Captura video.Después, el miércoles 7, será el momento del último duelo previo a la vuelta a Norteamérica. Para ello, el Inter Miami deberá trasladarse rumbo a Tokio, donde chocarán ante el Vissel Kobe.
Una vez culminados los cuatro duelos asiáticos, será el momento de regresar a casa. Leo volará otros 11 mil kilómetros para aterrizar nuevamente en Florida, donde aún quedará tiempo para el último partido de pretemporada.
Lionel Messi, sonriente al bajar de avión que lo llevó hasta Arabia Saudita con el Inter Miami.Luego de recorrer casi 32 mil kilómetros en una semana, Messi jugará uno de los duelos más especiales de su carrera: se enfrentará por primera vez a Newell’s. El partido se jugará en el DRV PNK Stadium el próximo 15 de febrero.
Martino, sonriente y entusiasmado por lo que se le viene al Inter Miami. Foto: EFE.De esa forma, con siete partidos de pretemporada en la espalda, el Inter Miami dará por finalizada su exigente puesta a punto y empezará a someterse al roce oficial de la MLS. Lo harán seis días más tarde del duelo contra La Lepra, cuando reciban a Real Salt Lake y comience el sueño de Las Garzas de transformarse en serios candidatos a quedarse con la primera liga de su historia.