El inglés Oliver Bearman, de apenas 18 años y 305 días, tuvo este viernes su tan ansiado como inesperado debut en la Fórmula 1. Lo hizo como piloto de la legendaria Scuderia Ferrari. Y sin querer queriendo se convirtió en una máquina de pulverizar récords apenas se subió y recorrió sus primeros metros a bordo del auto del español Carlos Sainz, quien debió ser operado de una apendicitis y se perderá el Gran Premio de Arabia Saudita que se correrá en Jeddah.
En primer lugar, como dato destacado, Bearman se transformó en el primer piloto de Gran Bretaña en correr para Ferrari en un GP del circo máximo desde que el norirlandés Eddie Irvine fuera unos de los volantes del equipo en 1999. Así le puso un final anticipado a un paréntesis de 25 años que se esperaba que fuera cerrado por Lewis Hamilton y su programado -y estruendoso- desembarco para la próxima temporada.
Pero la historia no termina allí. El adolescente nacido en Chelmsford, la capital del condado de Essex, se transformó en el 776° piloto de la categoría desde su nacimiento en 1950. Es también el N°97 del Cavallino Rampante y el 12° nacido en Reino Unidos. Pero además rompió los esquemas. Tuvieron que pasar 52 años para un piloto debutara sin escalas en el asiento de una Ferrari, un equipo que suele apelar a contratar hombres más experimentados.
El último que había conseguido debutar al volante de la escudería creada por Enzo Ferrari fue el italiano Arturo Merzario, quien participó en 85 GP entre 1972 y 1979. No tuvo una carrera estelar -lo mejor fueron tres cuartos puestos-, pero se convirtió en héroe cuando en 1976 fue uno de los cuatro pilotos que rescató de las llamas y le salvó la vida al austríaco Niki Lauda.
Pero el protagonista de esta nueva historia no es Merzario, sino Bearman. Porque este sábado, cuando se dispute la carrera desde las 14 de la Argentina (Star+ y Fox Sports), romperá otros dos récords.
Ollie se convertirá en el tercer piloto más joven en correr un Gran Premio. El récord de precocidad lo tiene el neerlandés Max Verstappen, dominador absoluto de la F1 en las últimas tres temporadas, quien debutó a los 17 años y 166 días en el GP de Australia de 2015. El segundo más joven, en tanto, es otro hombre que está en actividad: el canadiense Lance Stroll, quien lo hizo a los 18 años y 148 días, también en Melbourne, pero en 2017.
Sí será el hombre -en realidad, chico- más precoz en competir para Ferrari. Pulverizará el registro que tenía el mexicano Ricardo Rodríguez, que debutó con el Cavallino Rampante en el GP de Italia de 1961, cuando tenía 19 años y 208 días. No terminó bien el piloto azteca: tres meses antes de cumplir 21 años murió en el GP de Ciudad de México de 1962 a bordo de un Lotus.
“Qué gran oportunidad, por supuesto, mis mejores deseos para Carlos y su recuperación. Pero es un gran momento y una gran oportunidad para mí y estoy listo para aprovecharlo al máximo. Un poco decepcionado con la clasificación, pero en general no puedo estar demasiado decepcionado», dijo el británico tras su flamante debut en la Fórmula 1.
«Estuvo tan cerca, tan cerca», añadió sobre el margen por el que quedó eliminado en la Q2 y que lo condenó a partir desde el 11° lugar de la parrilla, que tendrá a Verstappen, otra vez, desde la pole. “Por eso duele un poco más. Cometí un error en mi primera vuelta, así que tuve que hacer el tiempo en la segunda y los neumáticos no son realmente los mejores allí, así que mi error y lo aceptaré», añadió tras quedar a solo 32 milésimas de segundos de clasificar al último corte clasificatorio en su debut.
«Es mi primera carrera, así que no puedo esperar mucho, y ésta también es una pista muy difícil”, finalizó con una madurez notable.
Como llegó Oliver Bearman a Ferrari
Fue a finales de 2021 que Bearman se convirtió en miembro de la Ferrari Driver Academy, antes de debutar en la Fórmula 3 en 2022 con PREMA Racing. Si bien el novato inicialmente cruzó la línea en el primer lugar durante su primera carrera en Bahrein, una penalización de cinco segundos por límites de pista lo hizo retroceder al segundo lugar, dándole la victoria a Isack Hadjar.
Bearman comenzó a correr en karting cuando tenía siete años y lo hizo hasta los 14, cuando se sumó a los campeonatos de ADAC Formula 4 y de la Fórmula 4 italiana. En 2021 fue campeón de ambos certámenes. En 2022 dio el salto a la Fórmula 3 de la FIA con el PREMA Racing y terminó tercero en el certamen tras sumar ocho podios, incluida una victoria en la carrera sprint de Bélgica.
Bearman permaneció en PREMA y disfrutó de una sólida primera campaña en la F2. El adolescente consiguió las victorias en la carrera Sprint y la carrera principal en Bakú, y selló otras victorias en Barcelona y Monza. Terminó el año en sexto lugar en la clasificación de pilotos.
Sin embargo, este no fue el único logro de Bearman en 2023. En octubre, el británico tuvo su primera experiencia al volante de un coche de F1 cuando probó un Ferrari con especificaciones 2021 en Fiorano, Italia. Además, participó en dos sesiones de practicas libres 1 para Haas en las últimas carreras de la temporada de 2023 de la Fórmula 1, y el joven británico tuvo su primer fin de semana de la máxima categoría corriendo en México antes de continuar con una salida en Abu Dhabi.
Ollie también regresó a la acción con Haas en la prueba de postemporada de 2023 en el circuito de Yas Marina. Unas semanas mas tarde, fue confirmado como piloto de reserva tanto de Ferrari como de Haas para este 2024, año en el que también disputa su segunda temporada en Fórmula 2.
En la categoría telonera de la Fórmula 1, donde habitualmente compite contra el argentino Franco Colapinto, finalizó 16° en ambas carreras del primer fin de semana de competencia del año en Bahréin y se quedó con la pole position para el GP de Arabia Saudita, donde ahora correrá en un auto mucho más potente y legendario.