Tras la contundente victoria confirmada por los primeros datos del escrutinio provisorio, el oficialismo correntino celebró el triunfo en el búnker de Vamos Corrientes. El gobernador electo, Juan Pablo Valdés, y el mandatario saliente, Gustavo Valdés, encabezaron un acto con un fuerte mensaje que trascendió las fronteras provinciales.
Juan Pablo, eufórico
«Hoy Corrientes ha decidido que tiene un nuevo Gobernador en primera vuelta», fueron las primeras palabras de un eufórico Juan Pablo Valdés, ratificando la victoria que los números oficiales comenzaban a reflejar con claridad.
Gustavo Valdés y una bajada nacional
A su turno, el gobernador Gustavo Valdés tomó el micrófono para calificar la jornada como «un día histórico para los correntinos», producto «del esfuerzo de cada uno de nosotros y de cada militante». Sin embargo, su discurso rápidamente adoptó un tono más duro y con un claro destinatario nacional. Tras afirmar que fue «la campaña más dura de la que se tenga memoria», dejó una frase contundente: «Los correntinos no nos doblamos a wachazos y acá estamos parados nuevamente».
El mandatario también celebró el éxito territorial de la alianza, asegurando: “Ganamos prácticamente en todas las intendencias porque pusimos lo que había que poner”.
Pero el eje central de su mensaje fue un llamado a la unidad y al diálogo dirigido al resto del país. «Al pueblo argentino decirle que nosotros los correntinos estamos dispuestos a seguir caminando juntos», proclamó Gustavo Valdés. Insistió en que «únicamente el diálogo maduro, la sensatez, la humildad y el consenso es lo que construye las naciones y las hace grandes».
En esa misma línea, envió una convocatoria a sus pares y a la dirigencia nacional. «Correntinos, es hora de que nosotros empecemos a empujar para construir a la Argentina vigorosa y que se levante. Los argentinos tenemos que estar unidos, las provincias tienen que estar unidas», concluyó, cerrando una celebración provincial con la mira puesta en el escenario político nacional.