El organismo del fútbol internacional sancionó a los jugadores surgido de Colón y Unión respectivamente, por haber jugado para la Selección de Malasia con documentación falsificada.
El fútbol santafesino quedó envuelto en una noticia inesperada que traspasó fronteras. Facundo Garcés, exreferente de Colón, e Imanol Machuca, surgido de Unión, fueron suspendidos por la FIFA durante un año tras comprobarse que jugaron para la Selección de Malasia con documentación falsificada.
La medida no recayó solo sobre ellos, sino también sobre otros cinco futbolistas que participaron el pasado 10 de junio frente a Vietnam, en la tercera ronda clasificatoria para la Copa Asiática 2027. La Federación de Fútbol de Malasia (FAM) fue multada con 350.000 francos suizos (alrededor de 375.000 euros) por haber presentado consultas de elegibilidad adulteradas para habilitar a los jugadores.
El defensor que hasta hace poco fue capitán de Colón y el mediapunta que brilló en Unión, deberán ahora cumplir 12 meses de suspensión sin poder participar de ninguna actividad relacionada con el fútbol. Además, como sanción individual, deberán abonar una multa de 2.000 francos suizos cada uno.
La FIFA informó que el caso también fue elevado al Tribunal de Fútbol, que definirá si en el futuro estos jugadores podrán representar a Malasia en competencias oficiales. La federación y los futbolistas implicados cuentan con diez días para pedir una resolución fundamentada, que eventualmente podría derivar en una apelación.
La noticia repercute con fuerza en Santa Fe: Garcés había dejado Colón a fines de 2024 tras el duro descenso, mientras que Machuca había emigrado un año antes luego de consolidarse como una de las grandes promesas de Unión. Hoy, ambos atraviesan un parate que amenaza con frenar su proyección en el plano internacional y los coloca en el centro de un escándalo de alcance mundial.
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