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Norberto Benavides y el drama de ser papá de pilotos del Dakar: “El día que me digan que no corren más, estaré más contento»

El campamento sufre la transformación a medida que el sol cambia de posición en el medio del desierto. Un rectángulo vacío, delimitado por vallas, comienza a poblarse a medida que llegan los camiones y las asistencias, mientras los competidores aceleran en plena etapa del Dakar.

La caravana de transportes pesados, camionetas y todo tipo de motorhomes transitan las rutas y autopistas saudíes hasta llegar al campamento, que rápidamente después de media mañana tomar color y vida.

Por allí, montado en una bicicleta, se paseaba Norberto Benavides, que llegó el viernes último a Arabia Saudita para acompañar a sus hijos, verdaderos protagonistas del Dakar. Kevin, por ser el último ganador de la carrera más extrema del planeta, y Luciano, actual campeón mundial de la especialidad.

Norberto fue piloto de moto. Corrió en Enduro, y siempre estuvo ligado al mundo de las dos ruedas. Como deportista, como competidor, como empresario y comerciante en Salta. La pasión por el vértigo y la velocidad se las contagió a sus hijos, que muy bien aprendieron y llevaron a lo más alto a la Argentina en la especialidad de off road.

“Kevin era chiquito y lo hacía competir. Recuerdo que había un vago que les ganaba a todos, y Kevin lo seguía de atrás. Yo le decía que tenía que pasarlo en las curvas, que allí es donde se ganan las carreras. Que tenía que atreverse a meter la rueda trasera en la cuerda, para superarlo, o tirarse por afuera, pero que no había que seguirlo. Y Kevin, después de escucharme, lo hizo. Y lo pasó, y empezó a ganar. No lo paraba nadie”, recuerda Norberto en el acceso principal del campamento de Al Dawadimi, al centro geográfico de Arabia Saudita, a la espera de sus hijos.

“Luciano comenzó a correr de más chico. Ya a los cinco años estaba corriendo. No desentonaba pese a la corta edad, y por supuesto de inmediato demostró que tenía mucha velocidad para las motos”, indicó el salteño.

» Se sufre un montón. El hecho que haya sido piloto es peor, porque uno sabe qué puede pasar», aseguró Norberto. Foto Roberto BerasateguiEl tiempo pasó y los chicos se hicieron grandes. No sólo de edad, con Kevin de 35, y Luciano de 28, sino que además hicieron grande al apellido, que domina la actividad en el orden mundial, con el Dakar y el título mundial del W2RC.

Pero Norberto destaca que hay aspectos que son más importantes que los resultados, aunque aún pareciera no dimensionar todo lo conseguido por sus hijos: “La verdad es que no lo puedo creer hoy en día. Es muy difícil meterse en este ambiente, dar pelea contra los mejores. Luego más complejo es ubicarse adelante. Ni hablar que uno sea ganador del Dakar y que otro sea campeón del mundo. Y ambos son mis hijos, eso es increíble. Me pasa que todavía lo pienso y no caigo que suceda todo esto”.

Pese a los títulos, Norberto, enfundado en una camiseta flamante del equipo KTM, equipo en el que corre Kevin (Luciano está en Husqvarna, que pertenece al grupo austríaco también), le confesó a Clarín: “Estoy feliz de la vida con los logros de ellos. Pero el día que me digan que no corren más, voy a estar más contento. Pero la vedad, me cago del miedo (risas). ¿Qué querés que te diga? Se sufre un montón. El hecho que haya sido piloto es peor, porque uno sabe qué puede pasar. Nosotros cuando corríamos Enduro poníamos cuarta de casualidad. Acá ellos van a fondo toda la etapa, entonces a mí me da mucho miedo”.

Kevin corre en el equipo KTM y ganó el Dakar el año pasado. Foto REUTERS/Hamad I MohammedKevin corre en el equipo KTM y ganó el Dakar el año pasado. Foto REUTERS/Hamad I MohammedEl diálogo pareció ser una distracción para don Benavides, que admitió que buscar distracciones mientras sus hijos aceleran a fondo sobre terrenos desconocidos, donde el peligro se potencia en una actividad, como todas las del deporte motor, que conlleva riesgos propios: “Mientras ellos están corriendo la etapa, yo le ruego a Dios. Muchos creen que estoy mirando los tiempos, que estoy pendiente de cada etapa. No me interesa nada, sólo quiero que lleguen bien”.

Al rato, llegaron juntos los hermanos Benavides. Kevin fue segundo, a 3m12s del chileno Ignacio Cornejo (Honda), mientras que Luciano arribó tercero. Sin embargo, el defensor del triunfo del Dakar 2023 quedó ahora en el 5° lugar, a 21m39s de la punta de la clasificación general, mientras que Luciano sigue 8°, a 43m12s (con la penalización de 15 minutos incluida por el cambio de motor).

Los pilotos llegaban exhaustos por el extenso recorrido de la 7a etapa, con 873 kilómetros. «Nos despertamos a las 3:30 y antes de las 5 salimos, de noche, a correr la etapa», comentó Kevin, que sólo quería descansar. Diego Llanos está 23°, Santiago Rostan, 30° y Santiago Urquía, 75°.

Luciano forma parte del equipo Husqvarna y es el vigente campeón mundial del W2RC. Foto  PATRICK HERTZOG / AFPLuciano forma parte del equipo Husqvarna y es el vigente campeón mundial del W2RC. Foto PATRICK HERTZOG / AFPEn cuatriciclos, Manuel Andujar había ganado la tapa, pero luego recibió una penalización de 15 minutos por no pasar por un way point y ahora el francés Alex Giroud está a solo 6 minutos del piloto argentino, líder.

En autos, parece que la carrera tendrá una definición mano a mano con dos ex campeones mundiales de Rally: Carlos Sainz (Audi) y Sebastien Loeb (Prodrive), que ganó la etapa y recortó la diferencia en la general a 19 minutos respecto del piloto español. El mendocino Juan Cruz Yacopini se ubica 24° en la tabla.

Un golpe de escena sufrió la representación argentina con la rotura del diferencial del Taurus del cordobés Nicolás Cavigliasso, que lo retrasó definitivamente para marginarlo de toda pelea en la categoría Challenger, que en las últimas horas sufrió la exclusión de la familia polaca Goczal, que dominaban a placer, pero se advirtió el uso de un embrague de carbono no autorizado en sus vehículos.

La actividad continuará le lunes, con la 8a etapa, con la unió entre los campamentos de Al Dawadimi y Ha’il, sobre un recorrido de 678 kilómetros, de los cuales 458 serán de especial.

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