Más de medio centenar de productores yerbateros partieron de Misiones para visibilizar en Buenos Aires la crisis por la que atraviesa el sector tras la desregulación del mercado que impulsó el Gobierno Nacional en diciembre del año pasado a través del decreto 70/2023. Los yerbateros buscarán reunirse con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y harán una mateada al pie del Obelisco este miércoles a la tarde.
“Al productor le están quedando menos de 200 pesos por kilo de hoja verde que entrega en los secaderos si se descuenta el costo del flete, el pago de los cosecheros y la corresponsabilidad gremial”, se quejó Jorge Skripzuk, un yerbatero de la zona centro de Misiones que integra la delegación.
A principios de este año los productores recibían 370 pesos de contado por la materia prima, pero cinco meses después el precio cayó un 19% y los plazos de pago se extendieron hasta los 120 días. En el medio, los tareferos (cosecheros) consiguieron un incremento escalonado del 61 por ciento para el “corte y quiebre”. Por esa tarea los obreros rurales recibirán $52.000 por tonelada cosechada en junio y $52.000 en julio. Por las tareas de “viruteada y descopada”, los montos ascienden a $59.000 este mes, y se elevan a $67.000 en julio.
No será la primera gestión que encaren los yerbateros ante el Gobierno libertario. Ya se reunieron con el secretario de Bioeconomía, Fernando Vilella; pasaron por el Congreso, y ahora intentarán llegar al nuevo Jefe de Gabinete, Guillermo Francos.
En principio, los yerbateros tienen previsto instalarse en cercanías de la Casa Rosada y desde las realizarán una mateada en el Obelisco, donde estarán regalando paquetes y plantines de yerba a los transeúntes.
Skripzuk dijo que el viaje a Buenos Aires tiene como finalidad “que las autoridades vean nuestras inquietudes: pedimos recuperar facultades del Instituto Nacional de Yerba Mate (INYM) para que siga fijando un precio base para el producto, que el Gobierno Nacional designe al presidente del Instituto y se frene la importación de yerba desde Paraguay y Brasil.
El productor fue uno de los que pasó por el Congreso, donde expuso ante la Comisión de Agricultura y Economías Regionales. “Es el cuarto viaje que hacemos y si no hay una solución veremos qué medidas tomar”, advirtió.
El decreto de desregulación de la economía generó un verdadero descalabro en el sector yerbatero. La norma le quitaba las principales facultades, entre ellas la de fijar un precio mínimo para la hoja verde y la yerba canchada (seca, sin molienda) teniendo en cuesta una grilla de costos de producción.
En Misiones hay más de 12.500 productores yerbateros, la mayoría de baja escala, y otras 15.000 personas dependen de la actividad. “Somos muchos los que vivimos de la yerba: desde el productor al tarefero, a los que prestan servicio, el transporte de cargas. Si seguimos con este modelo vamos a la misma crisis que sufrimos en los 90 cuando los productores terminaron malvendiendo sus tierras y terminaron cerca de los pueblos viviendo de planes sociales.
La semana pasada los yerbateros elevaron una nota al Gobierno Nacional con los mismos planteos que ahora quieren hacer personalmente a Francos. En ese escrito dejaron en claro que la falta de presidente en el INYM imposibilita llevar adelante actos institucionales, entre los cuales se encuentra el llamado a elecciones para renovación del directorio.
SN