En diálogo con Canal E, el analista político Eduardo Ibarra analizó la estrategia electoral del oficialismo de cara a las legislativas del 26 de octubre, poniendo el foco en la figura de Patricia Bullrich, el liderazgo de Javier Milei y la apatía ciudadana.
Bullrich: una jugada política con doble lectura
La precandidatura de Patricia Bullrich para el Senado por la Ciudad de Buenos Aires generó múltiples interpretaciones. Para Ibarra, esta decisión no solo busca reforzar la presencia de La Libertad Avanza en la capital, sino también desplazarla de la gestión nacional: “Más allá de que la figura de Patricia Bullrich es una figura muy fuerte, también sabemos que La Libertad Avanza, y tanto Javier Milei como Karina Milei, quieren centralizar todo en la figura del presidente”, señaló.
Desde esa lógica, el analista sostuvo que su postulación puede interpretarse como una estrategia para quitarle protagonismo sin confrontarla directamente:“Es una forma elegante de correrla de la gestión y que ocupe un lugar importante en la ciudad pero no tan importante a nivel nacional”, explicó.
Además, destacó la intención de replicar en CABA la alianza con el PRO ya concretada en Provincia de Buenos Aires, con el fin de asegurarse una victoria más amplia: “La idea es restituir la alianza con el PRO, como se hizo en Provincia, para poder ganar con mayor margen la Ciudad”.
Milei, un estilo de gestión confrontativo y coyuntural
Respecto al estilo del presidente, Ibarra remarcó que la confrontación es su sello distintivo:”Es una marca del presidente Javier Milei la confrontación, las decisiones duras con sus enemigos, porque él no tiene adversarios sino enemigos”, afirmó.
Esa lógica se mantiene incluso en sus vínculos internos:“Las alianzas son siempre coyunturales. La que hizo con Bullrich y Macri le permitió ganar, pero después siguió con una impronta de campaña permanente”.
Al analizar la dinámica interna del oficialismo, Ibarra apuntó: “Ellos entendieron que eran quienes se imponían en la disputa interna del espacio de centroderecha”, por eso avanzaron con acuerdos que les permitieran consolidar ese lugar.
Frente a las elecciones en Provincia y Ciudad, el resultado electoral definirá si Milei profundiza o modera su estilo: “Si le va bien en las elecciones, me parece que lo va a profundizar”.
Campaña: antikirchnerismo como eje y bajo entusiasmo electoral
En cuanto al enfoque de campaña, Ibarra fue tajante: “El eje central va a ser el antikirchnerismo. Van a apostar todo a ese eslogan: Kirchnerismo Nunca Más”.
Esta estrategia busca apelar al votante antiperonista más que convencer a una mayoría amplia: “Ellos siguen sosteniendo que el partido más grande de la Argentina es el antikirchnerismo”, dijo, aclarando que un triunfo ajustado sería suficiente para sus objetivos.
Por último, el analista alertó sobre el bajo nivel de participación que se espera en las próximas elecciones: “Estamos alrededor de un presentismo del 52 al 55% como algo esperable”, comentó, basándose en las últimas mediciones en distritos como la segunda sección de Provincia.
La falta de entusiasmo se asocia a la desconexión ciudadana con el proceso electoral: “No estamos en clima electoral. Hay apatía hacia todo lo que tiene que ver con la participación democrática”.